Era una operación a corazón abierto, pero terminó de una forma inesperada. Los médicos del Hospital Universitario del Norte de Noruega, en la localidad Tromsø, prendieron fuego de forma accidental a un paciente durante la intervención. El motivo fue la mezcla de alcohol quirúrgico para desinfectar y el uso de un bisturí eléctrico. A pesar…
Qué bien se lo pasan los muy cerdos. Ya no saben que probar, se han pajeado con toda clase de aberraciones orientales y esta es una más pero más vistosa. Supongo que en su subconsciente tienen en mente a sus abuelos.