Facial Scarring
Esta posiblemente sea la forma más extrema de escarificación que haya visto. Se trata de Facial Scarring (cicatrices faciales) y es una práctica que los Hunos -además de deformarse los huesos del cráneo para que les quedara la forma de la cabeza más alargada- ya utilizaban en el siglo V a modo de adorno. Ya en el siglo XIX, este tipo de cicatrices se consideraban una insignia de honor en los duelos entre antiguas escuelas de esgrima. En el siglo que nos toca vivir, €œdepilarte€ una ceja o hacerte unos zarpazos en la cara ya sabemos que es sinónimo de ser el tío más cool del barrio.