Un cubano vivió 30 años sin saber que tení­a un trozo de vidrio en un ojo

ojo_nor-301xXx80

Un cubano vivió durante 30 años sin saber que tení­a en un ojo un trozo de vidrio de 1,3 centí­metros de largo, que sólo comenzó a molestarle hace cuatro meses y ya le fue extraí­do, informó hoy el diario oficial Juventud Rebelde.

Ese rotativo relata que hace cuatro meses el cubano Luis Aguilera, de 63 años, comenzó a sentir «molestias» en su ojo izquierdo cuando se lavaba la cara o tornaba la vista y, al acudir a un centro oftalmológico, los médicos descubrieron que tení­a un cuerpo extraño.

Tras una cirugí­a menor, le fue extraí­da «una fracción de vidrio» de 1,3 centí­metros de largo por 3 milí­metros de ancho que se habí­a alojado entre el párpado y el globo ocular.

Los cirujanos concluyeron que la única explicación posible es que el vidrio haya llegado allí­ tras un accidente de tránsito sufrido hace tres décadas por Aguilera, quien trabajó como conductor profesional durante 40 años en el oriente de la isla.

«Choqué contra una mata y el parabrisas me vino encima hecho pedacitos, pero solo sufrí­ contusiones en el cuerpo y me recuperé perfectamente. Jamás presenté molestias en los ojos», recordó Aguilera sobre aquel accidente.

Los oftalmólogos explicaron que el vidrio debe haberse mantenido inerte sin provocar rechazos del organismo, hasta que hace cuatro meses empezó a sobresalir y a ocasionar molestias.

Publicaciones Similares

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.